Las cosas
importantes se dicen en voz baja.
Los cuentos, las
historias
las dulces
confesiones,
las verdades
descalzas.
Las cosas
importantes no copan las portadas
ni llenan
titulares.
Carecen de sección
fija
en la prensa de la
semana.
No siguen fieles,
sumisas
las líneas
editoriales
(se anuncian, si acaso, discretas
en
notas a pie de página)
Las cosas
importantes se dicen en voz baja.
A voz en grito se
alzan
las consignas, las
proclamas,
las mentiras
abiertas,
las defensas a
ultranza.
Las cosas
importantes apenas si se oyen
entre el bullicio,
el ruido,
la sordera que
dejan
las razones
esgrimidas
desde el campo de
batalla.
Las cosas
importantes se dicen en voz baja.
Los “cuenta conmigo”, “te espero”,
los “duerme tranquila”, “ten calma”.
Por no importunar,
las cosas
importantes van a
tientas.
Por no arrebatarle
agenda
a las cosas de
importancia.
Las cosas
importantes
tantas veces ni se
dicen.
Se rezan en los
silencios,
se intuyen en las
miradas.
Las cosas
importantes se dicen en voz baja.
Joven, cristiano, músico. Amante de la poesía, el arte y la vida...
ResponderEliminarY gran persona...
Precioso poema, preciosa oración, hermano. Con tu permiso la utilizaré en algún "orar"
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